DIY: Larga vida al tarro

Que digo yo que está genial guardar en un tablón de Pinterest las ideas que le gustan a una pero, de vez en cuando, también está bien llevarlas a cabo ¿no?

Inspirada por este proyecto de Design Sponge que vi un día en Pinterest,  me he animado a reciclar unos tarros que tenía en casa y que merecían una segunda oportunidad.  Mi bolsillo lo agradece y yo ando tan contenta con el resultado que estoy muy satisfecha conmigo. Todo son ventajas.

Los materiales que necesitamos:
-Los botes viejunos que queremos recuperar. La gracia de este proyecto es la tapa así que, muy importnate, con tapa.
-Papel bonico. El proyecto que copié utilizaba papel de scrapbook. Yo tenía en casa papel de origami de un proyecto anterior y lo hice con él.
-Cola
-Un pincel. Sí, lo mío es una brocha. Cuando me puse manos a la masa me di cuenta de que no tenía pincel. Pero como ya se me había metido entre ceja y ceja que iba a hacerlo, busqué una opción b.
-Lápiz
-Tijeras

Los sencillos pasos: 

Pues el primero es bien sencillo. Agua, jabón, estropajo y mucha voluntad. Se trata de quitar las etiquetas de los botes. Algunas salen tan fácilamente, nada más tirando de ellas. Con otras, hace falta empeño.  Desde luego, con agua caliente y un estropajo metálico, esto está chupao.

Veo que los siguientes pasos los he resumido en una única foto. Así estaba yo de concentrada que ni me pispé.  Por otro lado, creo que es más que evidente lo que hay que hacer.

Dibujamos sobre el papel un círculo, usando la tapa como molde. Seguidamente, hacemos al rededor un círculo más grande. Yo utilicé un molde más grande, para asegurarme que el círculo saliera perfecto. Recortamos el papel con líneas horizontales.

A continuación, con ayuda del pincel, iremos impregnando estas pestañas en cola y las iremos doblando, siguiendo el sentido de las agujas del reloj.  Lo hacemos con cada una de las tapas y las dejamos secar.

Tras secarse, vuelven a encajar perfectamente en sus correspondientes botes. Ya los podemos rellenar con lo que necesitemos.  Yo los voy a utilizar para guardar las cositas que utilizo en cuando hago manualidades.  En estos guardé botones...

En estos otros, las cintas de washi tape, que andaban rodando por la casa sin un sitio fijo.

Con este chiqui proyecto, rompo con la maldición de que no hago DIY.   Es posbile que me anime a hacer más cositas porque, aunque no sean perfectos, a mí mis nuevos botes me encantan.